La transformación de una economía tradicional basada en el efectivo hacia una en la que predominan los pagos digitales es un fenómeno que está modificando la forma en que interactuamos en el ámbito financiero. Este cambio, impulsado por avances tecnológicos, modificaciones en las preferencias de los consumidores y políticas públicas, permite transacciones más rápidas, seguras y eficientes. La digitalización de los pagos no solo beneficia a usuarios y empresas, sino que también plantea retos en términos de privacidad, seguridad y equidad en el acceso a la infraestructura digital.
Modelos TAM y UTAUT en el Análisis de la Economía sin Efectivo
Para entender cómo y por qué los usuarios adoptan los nuevos sistemas de pago digital, es fundamental recurrir a modelos teóricos que analizan la aceptación de tecnologías. Dos de los modelos más reconocidos son el Modelo de Aceptación Tecnológica (TAM) y la Teoría Unificada de Aceptación y Uso de la Tecnología (UTAUT).
Modelo de Aceptación Tecnológica (TAM)
Desarrollado por Fred Davis en 1989, el TAM se centra en dos creencias fundamentales:
• Utilidad Percibida (PU): La creencia de que el uso de la tecnología mejora el desempeño.
• Facilidad de Uso Percibida (PEOU): La percepción de que la tecnología es fácil de aprender y utilizar.
Estas percepciones influyen directamente en la actitud del usuario, su intención de uso y, finalmente, en la adopción efectiva de la tecnología. Además, variables externas como la edad, la experiencia y la cultura pueden modular estas percepciones, haciendo del TAM una herramienta valiosa para analizar la adopción de pagos digitales.
Teoría Unificada de Aceptación y Uso de la Tecnología (UTAUT)
El UTAUT, propuesto por Venkatesh y colaboradores en 2003, integra elementos de modelos previos para ofrecer una visión más completa. Este modelo identifica cuatro puntos clave:
• Expectativa de Rendimiento: Grado en el que se cree que el sistema mejorará el desempeño.
• Expectativa de Esfuerzo: Facilidad percibida en el uso del sistema.
• Influencia Social: Impacto de las opiniones y recomendaciones del entorno.
• Condiciones Facilitadoras: Infraestructura y soporte organizacional para el uso de la tecnología.
UTAUT también incorpora moderadores como la edad, el género, la experiencia y la voluntariedad de uso, permitiendo un análisis detallado en distintos contextos, tanto en entornos empresariales como de consumo.
En el contexto de la economía sin efectivo y los pagos digitales:
• TAM permite identificar cómo las percepciones de utilidad y facilidad de uso impulsan la adopción de tecnologías de pago.
• UTAUT ofrece una visión más amplia, integrando la influencia social y las condiciones facilitadoras, aspectos cruciales para entender la adopción en diferentes segmentos de la población.
Ambos modelos son herramientas complementarias que ayudan a diseñar estrategias orientadas a promover la aceptación y el uso de los pagos digitales, permitiendo identificar barreras y potenciar facilitadores en la transición hacia una economía sin efectivo.
La Transición Global del Efectivo y el Auge de los Pagos Digitales
La evolución hacia un mundo sin efectivo responde a múltiples factores:
• Avances Tecnológicos: La proliferación de billeteras móviles, tarjetas sin contacto y plataformas en línea ha simplificado las transacciones, ofreciendo mayor velocidad y seguridad.
• Cambio en las Preferencias del Consumidor: Especialmente entre las generaciones más jóvenes, la búsqueda de métodos de pago cómodos y seguros ha acelerado la adopción digital, tendencia que se vio impulsada por la necesidad de métodos sin contacto durante la pandemia o en algunos casos por necesidades económicas de los países.
• Eficiencia Operacional: Tanto empresas como gobiernos se benefician de la reducción de costos y el mejor control en las transacciones, lo que a su vez mejora la eficiencia y la transparencia.
• Políticas Públicas e Inclusión Financiera: Iniciativas gubernamentales han fomentado el uso de pagos digitales para combatir la economía informal y ampliar el acceso a servicios financieros.
Esta transición global no solo implica beneficios en términos de eficiencia y seguridad, sino también desafíos relacionados con la privacidad y la ciberseguridad, aspectos que deben ser abordados de manera integral para asegurar una transformación sostenible.
Latinoamérica: PIX y Bre-B
La adopción de pagos digitales en Latinoamérica se puede ver en dos casos en polos opuestos:
PIX (Brasil)
• Sistema de Pagos Instantáneos: Desarrollado por el Banco Central de Brasil, PIX permite realizar transferencias en segundos, funcionando 24/7.
• Adopción Masiva: Se ha consolidado como el método de pago preferido en Brasil, superando al efectivo.
• Facilidad de Uso: Los usuarios pueden utilizar alias, números de teléfono o correos electrónicos, y las transacciones se confirman de forma inmediata.
• Beneficios: Menores costos, mayor seguridad y promoción de la inclusión financiera han sido claves para su éxito.
Bre-B (Colombia)
• Sistema de Pagos Inmediatos: Desarrollado por el Banco de la República, Bre-B busca facilitar transacciones en segundos, independientemente de la entidad financiera.
• Plataforma Centralizada: Garantiza rapidez, transparencia y seguridad en las transacciones.
• Objetivos: Promover la inclusión financiera y reducir la dependencia del efectivo, marcando un gran avance en la modernización del sistema financiero colombiano.
¿Serán las sociedades del futuro entornos sin dinero físico? ¿Estamos dispuestos a permitir que los gobiernos tengan acceso a todos nuestros movimientos financieros?
No lo creo. Aunque los avances tecnológicos son herramientas que facilitan nuestra vida, no deben restringir nuestras libertades individuales. El efectivo garantiza un grado de anonimato fundamental para preservar nuestra privacidad.